Nuestro día a día está cada vez más influenciado por nuestra vida digital. Las redes sociales se han convertido en una herramienta fundamental para conectarnos con nuestro entorno, ya sea familia, amigos, trabajo/estudios y hobbies e intereses.

Para mantener segura toda esa información personal y protegerla del cibercrimen, es fundamental implementar prácticas sólidas que garanticen su integridad y confidencialidad. Aquí te mostramos los 10 mandamientos de la seguridad en redes sociales.

Publica únicamente lo indispensable.

Cada publicación en redes sociales abre una puerta a tu vida privada. Basta con que esa información caiga en manos equivocadas para vivir situaciones no deseadas como suplantación de identidad, estafas o engaños.

Es crucial mencionar aparte la publicación de fotos de niños. Las leyes de protección infantil son cada vez más estrictas en cuanto a la privacidad en línea, recordando que todo lo publicado en internet escapa a tu control.

Establecer la configuración de privacidad para cada cuenta.

El crimen cibernético ha evolucionado tanto que nuestros datos pueden ser utilizados para suplantar identidades o cometer estafas. Por esta razón, detalles sensibles como la fecha de nacimiento, dirección, trabajo o estudios pueden ser utilizados en nuestra contra.

Proteger nuestra privacidad de manera consciente en cada perfil es crucial para resguardar esta información. Incluso los datos que parecen inofensivos pueden representar un peligro en manos equivocadas.

Un consejo infalible: si prefieres que algo no sea visto por todos, quizás sea mejor no publicarlo.

Los datos son el nuevo petróleo, como ESET analizo en uno de los episodios de su podcast «Conexión Segura». Tanto las empresas como los cibercriminales los encuentran atractivos, lo que subraya la importancia de controlar los permisos otorgados a las aplicaciones que instalamos o a los servicios con los que creamos cuentas.

No confíes en personas desconocidas.

Más allá de los beneficios de Internet, es esencial considerar su otro lado, el Lado B, para evitar decepciones. Lamentablemente, los casos de fraude y acoso son comunes en el mundo digital, donde las redes sociales son un objetivo cada vez más frecuente de los cibercriminales.

La precaución y la desconfianza son clave al interactuar con personas desconocidas. Por lo tanto, nunca es recomendable aceptar solicitudes de amistad de extraños ni proporcionar información personal.

Antes de hacer clic en los enlaces recibidos en mensajes, es importante verificarlos.

El escenario se repite una y mil veces: a través de nuestras redes sociales recibimos mensajes de contactos desconocidos que prometen algún beneficio o premio, acompañados de un enlace que parece ser la clave para acceder a una recompensa. Sin embargo, un simple clic puede llevarnos a un sitio comprometido que solicita nuestros datos personales o a la descarga de software malicioso.

Existe una regla de oro que resulta efectiva en estos casos: si algo parece ser demasiado bueno para ser verdad, probablemente no lo sea.

Opta por contraseñas largas y complejas.

Optar por una contraseña sólida y larga es crucial para proteger nuestras cuentas en diversas redes sociales. Se recomienda utilizar frases de alrededor de 20 caracteres que incluyan letras, números, mayúsculas y caracteres especiales.

Es importante evitar contraseñas fáciles de adivinar, como aquellas basadas en fechas, nombres, o las clásicas «123456» o «password».

Otro consejo es no usar la misma contraseña en distintas cuentas, ya que si una es comprometida, el ciberatacante podría acceder a todas las redes sociales. Para generar contraseñas seguras y no tener que recordarlas, es útil utilizar un gestor de contraseñas.

Aplicar la autenticación de dos pasos.

La autenticación en dos pasos, también llamada doble factor de autenticación, es la mejor compañera para una contraseña segura. En la actualidad, todas las redes sociales ofrecen la opción de activar este segundo factor de seguridad para garantizar la protección de nuestras cuentas.

Gracias a esta capa adicional de seguridad, incluso si alguien logra obtener tu nombre de usuario y contraseña, no podrá acceder a tu cuenta. ¿Te gustaría saber cómo activarla en cada una de tus cuentas? Descúbrelo en el siguiente artículo de We Live Security escrito por ESET.

Asegúrese de utilizar una conexión a Internet segura.

Un primer paso importante es garantizar que tu red Wi-Fi tenga una contraseña segura y verificar la configuración correcta del router.

Si necesitas usar una red Wi-Fi pública, se recomienda conectarte a través de una VPN. Además, al ingresar información confidencial o credenciales, es preferible utilizar dispositivos móviles para navegar por Internet desde tu teléfono inteligente.

Hacer una copia de seguridad de la información.

Tan vital como proteger el acceso a tus datos personales es hacer una copia de seguridad de la información crucial. En situaciones como un robo, pérdida de dispositivo o infección de malware, esta medida resultará invaluable.

Al realizar tu copia de seguridad, es importante conocer la forma correcta de hacerlo y evitar los errores comunes que suelen surgir.

Cierra las cuentas que ya no estés utilizando.

Con el transcurso del tiempo, algunas plataformas se vuelven obsoletas y dejan de ser utilizadas. Las cuentas que creamos en ellas pueden convertirse en un eslabón débil en términos de seguridad en línea. Esto se debe a contraseñas probablemente débiles y a la falta de políticas efectivas y seguras de protección de datos en dichas plataformas.

Los hackers pueden aprovechar la huella digital que dejamos en línea. Por ejemplo, usar nuestra información sensible como fecha de nacimiento, lugares de trabajo, de estudio o de vivienda, entre otros, para armar un perfil falso que utilicen en una estafa u otro tipo de engaño, usurpando nuestra identidad.

Tener una medida de seguridad en su lugar.

Todos los puntos mencionados se verán reforzados al implementar una sólida solución de seguridad que proteja contra el phishing, el malware y sitios o archivos sospechosos que pueden llegar a través de las redes sociales.

Las soluciones de la marca ESET ofrecen diversas funciones que cubren todas las necesidades actuales de los usuarios. Por ejemplo, la capacidad de realizar acciones de forma remota en un dispositivo en caso de pérdida o robo, bloquearlo y enviar un SMS de alerta a usuarios designados, e incluso borrar los datos del dispositivo para mantener seguras nuestras cuentas.

En resumen.

Claro que este conjunto de diez buenas prácticas de seguridad podría ser más detallado, incluyendo acciones técnicas más específicas, pero al implementar estas medidas, se mejorará y reforzará la seguridad de todas nuestras redes sociales.

Al igual que los cibercriminales actualizan sus estrategias, es fundamental que los usuarios tomemos conciencia de la importancia de mantener seguras nuestras cuentas, ya que en ellas compartimos información de diversa índole que, en manos equivocadas, podría ser usada en nuestra contra.

Fuente web: https://www.welivesecurity.com/es/seguridad-redes-sociales/10-mandamientos-seguridad-redes-sociales/